Un matrimonio y
un hijo que no sale de su cuarto. Todo parece indicar que es una familia normal
con problemas normales. Una dulce madre, simpática, un tanto sobreprotectora y
un padre que desea poner límites pero se limita a aceptar lo que decide su
mujer. Un chico con algunos problemas de conducta que vive encerrado en su habitación.
En fin, una familia como cualquiera. Pero las apariencias suelen engañar y este
es uno de esos casos.
“El chico de la
habitación azul”, de Miguel Angel Diani, transcurre su primer mes de funciones
en el Teatro del Pueblo. Hugo Men, Amancay Espíndola y Gabriel Nicola (por
orden de aparición) se ponen en la piel de padre, madre e hijo de este núcleo
familiar que esconde más de lo que muestra hasta que las evidencias ya no
pueden ocultarse.
La dramaturgia de
Diani es feroz. Un espejo deformante de una sociedad que intenta siempre barrer
los horrores bajo la alfombra. Su obra no tiene filtro ni piedad pero derrocha
humor, aunque sea del negro. En este caso la historia bordea lo pérfido para
internarse en el horror. Uno de los muchos horrores, tanto micros como macros,
que solemos leer en los diarios o ver en la tele todos los días. Diani y Enrique
Dacal –el director- nos lo muestran en vivo y en directo. Entonces reímos. Para
distanciarnos. Para protegernos. Para seguir mirando para otro lado mientras el
teatro simplemente nos devuelve una realidad sólo un poco exagerada.
El elenco ofrece un gran compromiso con esa historia sagaz. Cada uno aporta su costado taimado para brindarles a sus criaturas la verdad de lo inverosímil, o viceversa. Seductora elección de Amancay Espíndola en la construcción de una madre distraída, cálida, risueña y hasta un tanto ingenua que la libera del verdadero rol de cómplice silenciosa y arquitecta fundamental de lo maligno. Hugo Men y Gabriel Nicola se sacan chispas –como suele decirse- en sus roles de padre e hijo respectivamente. Ambos aportan las cuotas de malignidad y ternura necesarias para edificar esa familia de valores genuinos e íntimos. Enrique Dacal eligió el camino del naturalismo para contar lo siniestro.
Un desafío para
el espectador dejarse llevar por esa historia que nos es ajena y propia a la
vez, lejana y cercana, tan antigua como reciente.
No se la pierdan.
FICHA ARTÍSTICA- TÉCNICA:
Autor: Miguel
Angel Diani
Actúan: Amancay
Espíndola, Hugo Men, Gabriel Nicola
Vestuario y
escenografía: Agustin Justo Yoshimoto
Asistencia de
dirección:Bea Apás
Prensa: Giacani-Lauro
Comunicación
Producción
ejecutiva: Paola Gómez
Puesta en escena
y dirección: Enrique Dacal
TEATRO DEL PUEBLO
Lavalle 3636 –
CABA - Teléfonos: 75421752